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Consejos para quienes adoptan un perro por vez primera

Un novedoso integrante se ha vinculado al grupo familiar, es un amigo inquieto, juguetón y solo quiere estar detrás de las personas que lo cuidan. Para quienes hayan decidido adoptar un perro y quienes se estrenen por vez primera como propietarios, los consejos que les compartiremos a continuación les resultarán de enorme interés y aprovechamiento. Efectivamente, para quienes han adoptado un can por primera vez, vale la pena seguir tips como los que les presentaremos en los siguientes párrafos.

Para iniciar correctamente con la alimentación del perro en su nuevo hogar, lo mejor es seguirle ofreciéndole el alimento que se le ha venido dando desde el sitio de donde procede. Con eso se sentirá más cómodo y no sufrirá de una diarrea apenas llegando a su nueva vivienda.

El alimento del perro mascota

Posteriormente se podrá decidir cuál será el mejor alimento que se incluirá en su dieta. Para quienes mezclen comida nueva con la comida anterior paulatinamente, durante una semana, será más sencillo transitar al cambio sin que sea algo abrupto para la alimentación del perro. Por lo demás, el pienso del can debe ser elegido de acuerdo con sus características físicas particulares, raza y edad. Si se tienen dudas acerca de este punto, lo mejor es consultar con el veterinario.

Por supuesto, si vamos a alimentar a nuestro perro mascota, tendremos que conseguir un bebedero y un comedero para ese can. En este sentido, también se tienen que considerar las particularidades físicas del perro como, por ejemplo, el largo de su hocico o si come con demasiada ansiedad, si tiene un cuerpo largo o corto, etc.

La identificación del can mascota

Otro aspecto prioritario para cuando se adopta a un perro por primera vez tiene que ver con la necesidad de identificarlo. Para ello se le deberá colocar un chip especial donde se presentarán sus datos principales. En caso de que el perro que adoptemos haya pertenecido a otra persona y tenga un chip con las referencias de ese antiguo dueño, es el veterinario quien debe retirárselo y colocarle un chip nuevo, o bien, cambiarle los datos a ese mismo identificador.

También es conveniente conseguir una plaquita para colgar en su arnés o en su collar. En esa pequeña placa se debe indicar el nombre, número telefónico y la dirección de la persona que es propietaria del perro. De ese modo, en caso de que se extravíe nuestra mascota, podrán localizarnos con mayor facilidad.

Vale la pena tomar nota acerca de donde se localizan las clínicas veterinarias más cercanas a nuestro domicilio y también consultar con nuestros amigos y parientes acerca de cuál es el veterinario de su preferencia. Hay que acudir con ese especialista para planificar la vacunación de nuestra mascota, así como también la desparasitación que se le deberá aplicar.

La primera visita al veterinario

Para proceder adecuadamente con esta visita hay que llevar una bolsita con premios y hacerle muchos mimos al can. Habiendo elegido un veterinario de confianza y teniendo una actitud conveniente, la primera visita al veterinario será algo incluso ameno para el perro.

No menos importante resulta elegir los juguetes más convenientes para el perro. En tal caso, es adecuado tomar en cuenta peluches, cuerdas o pelotas. En general, hay innumerables variedades de juguetes que pueden ser amenos, relajantes y positivos para el desarrollo emocional del perro. No es aconsejable que tenga el animal todos sus juguetes a la vista, ya que dejará de tener interés por ellos en poco tiempo.

Lo mejor es darle cierto tiempo a cada uno de esos juguetes y participar en estos juegos con nuestra mascota. En caso de que tengamos un cachorro como mascota, será importante para este joven can mordisquear algunos objetos y así mitigar los dolores que podría experimentar en sus encías.

Una jaula para nuestro perro

Una recomendación para tomar en cuenta es adquirir una jaula espaciosa para que el perro juegue en ella mientras la persona que lo atiende se encuentre realizando otras actividades y no tenga facilidad de vigilar sus acciones.

Para evitar que nuestro perro experimente nudos en el pelo, lo mejor es cepillarlo con frecuencia. Es una práctica que también permitirá que el animal tenga su pelo lustroso y sin pelos muertos. Para este fin es preciso adquirir un cepillo especial para las características de su pelaje.

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