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El absceso dental, habitualmente conocida como flemón, es una concentración de pus que se presenta como consecuencia de infecciones bacteriales. La aparición de este problema suele estar vinculado con intensos dolores en la cavidad bucal, detalle que provoca una reducción de las ganas de alimentarse por parte del perro. El problema puede manifestarse con tanta severidad como para que el perro experimente un cuadro total de anorexia.

Para conocer más afondo acerca del problema del flemón en los perros, lo que comentaremos en los párrafos siguientes te resultará de enorme interés.

Comprendiendo la presencia del flemón en el perro

Cuando se presenta un flemón o absceso en la boca del perro, el origen siempre es alguna problemática odontológica sin atender. Por lo consiguiente, es básico que sea examinado periódicamente el hocico de los perros. De ese modo podrá ser identificado cualquier factor de riesgo e impedir que la situación empeore.

Cuáles son los principales síntomas del flemón en los canes

Cuando aparece un flemón en la boca del perro suele manifestarse a través de síntomas como los que mencionaremos en lo que sigue:

Escasas ganas de alimentarse, al grado de llegar a la anorexia. Ciertos canes incluso se rehúsan a consumir comida seca o dura y únicamente son capaces de alimentarse con comida blanda.

Una patente hinchazón en la cara, en especial en torno a los ojos.

Una intensa inflamación de los ganglios linfáticos regionales

Halitosis, fiebre y la llamada sialorrea o babeo desmedido.

Es preciso señalar que en los casos más severos o si se carece de algún tratamiento para atender pronto el problema, la acumulación de bacterias puede arribar a la sangre del perro y propiciar que se presenten infecciones adicionales en otros órganos del animal.

Cuáles son las causas del flemón o absceso dental canino

Lo que causa la aparición de flemones o abscesos en los dientes del can siempre es la presencia de bacterias en condiciones como las siguientes: caries, fractura de la pieza dental y enfermedad periodontal.

Por lo consiguiente, podemos afirmar que la presencia de un absceso o flemón dental siempre es la consecuencia de una problemática bucodental sin atender.

Cómo se realiza el diagnóstico del flemón en los canes

Los abscesos dentales en los perros se fundamentan en dos puntos clave: la exploración de la cavidad bucodental y la realización de radiografías orales.

Por lo que se refiere a la primera medida, con frecuencia es preciso sedar al perro para llevar a cabo una revisión más completa del hocico del perro. En lo referente a las radiografías orales, deben de llevarse a cabo con el propósito de evaluar las condiciones de los dientes dañados por el flemón.

Acerca del tratamiento para el flemón en el can

Habiendo comprendido cómo se presenta el problema del flemón dental en el perro, es necesario que mencionemos ahora el tratamiento que se debe de seguir para curarlo. En este caso, el veterinario suele seguir la siguiente estrategia: el uso de antibióticos de gran espectro; la apertura del flemón para el drenado de la pus y para asear el área dañada. Es importante puntualizar que el antibiótico para atender la infección en la cavidad oral del can deberá ser recetado únicamente por el veterinario.

Cuando la problemática está relacionada con la enfermedad periodontal es necesario retirar de la dieta alimentos dulces y húmedos. También han de llevarse a cabo tratamientos odontológicos como los siguientes: retiro de bolsas periodontales, retiro de las piezas dentales con daños irreversibles, ferulización de las piezas dentales móviles, etc.

Cuando el problema tiene que ver con fracturas dentales, casi invariablemente lo que debe de hacerse es retirar las piezas dentales con fractura, si bien en lo canes que requieran preservar la totalidad de su dentadura (por ejemplo, por tener que participar en un certamen), es posible que se requiera la realización de una endodoncia, para que así se concrete la reconstrucción de la pieza dental.

También tenemos los casos de caries dentales, circunstancias en las cuales puede ser preciso llevar a cabo una endodoncia, aunque en los casos más severos, puede ser preciso extraer la pieza o piezas dentales que se encuentren dañadas.

Finalmente, para el caso de la prevención de esta enfermedad dental en el perro se deben de seguir medidas como las siguientes: cepillado dental, limpiezas orales periódicas y evitar que el can mastique objetos demasiado duros.