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Órgano de tipo muscular que desempeña variados roles, la lengua de los canes es un elemento clave para regular la temperatura corporal.

El perro, al no tener glándulas sudoríparas, utilizan la dinámica del jadeo para disminuir la temperatura de su cuerpo.

Por lo consiguiente, que un can saque mucho la lengua o que jadee constantemente se perfila como un comportamiento asociado por completo a la normalidad.

No obstante, para quienes se pregunten por qué razón un perro saca demasiado la lengua, justo al modo en el que lo hace una serpiente o como si tuviera sed con frecuencia, puede que se presente algún factor patológico que esté desencadenando ese abundante jadeo.

Razones por las que un can saca demasiado la lengua

El perro, al tener sus glándulas sudoríparas escasamente desarrolladas, no pierden demasiado calor con la evaporación del sudor. Por lo consiguiente precisan de medios alternativos, soluciones naturales diferentes a la sudoración para poder disminuir la temperatura de su cuerpo cuando es preciso.

Cómo autorregula el perro su cuerpo de manera natural

Uno de los medios más habituales que tiene el can para la regulación temporal propia es el jadeo. Y si bien, cuando se presenta el jadeo puede parecer que el ritmo de los latidos se ha incrementado en demasía, es preciso saber que el jadeo no propicia una hiperventilación, en tanto que el aire movilizado por tal dinámica únicamente solo transita por el espacio muerto, sin alcanzar nunca los alveolos.

A final de cuentas, el jadeo en el perro se presenta como una respuesta de tipo fisiológico que puede producirse por factores como el ejercicio físico o la temperatura del ambiente.

Causas patológicas relacionadas con el jadeo excesivo en los perros

Tomando en cuenta que el jadeo no se presenta por causas fisiológicas patentes- como las mencionadas de manera previa-, es posible que haya alguna enfermedad subyacente que esté causando tal circunstancia.

En primera instancia debemos mencionar el golpe de calor, mismo que se produce cuando acontece un aumento drástico de la temperatura o cuando en el ambiente se concentra abundante humedad. En los casos en los que la humedad rebasa el ochenta por ciento, la dinámica del jadeo deja de ser eficaz, en tanto que se complica la evaporación en las vías respiratorias.

En tales situaciones el perro manifiesta un jadeo afanoso y continuo, sacando mucho la lengua como cuando tiene muchos deseos de tomar agua.

En ocasiones el perro tiene fiebre y cuando esta condición inicia una etapa de descenso, se desencadenan dinámicas naturales orientadas a reducir la temperatura de su cuerpo, como es el caso justamente del jadeo.

Por otra parte, el jadeo excesivo en el perro también puede ser señal de que el animal está experimentando abundante dolor o molestias físicas.

Algo parecido sucede con los perros con sobrepeso u obesidad. Los canes con exceso de gordura experimentarán un anormal jadeo. En este mismo sentido un can con obesidad tiene que realizar un mayor esfuerzo para movilizarse en la cotidianidad al grado de padecer dolores en las articulaciones. Aunado a lo anterior, los excesos de tejido adiposo propician un aumento de la temperatura del cuerpo.

La predisposición de raza canina y la parálisis laríngea también suelen producir jadeo excesivo en el perro. En especial en lo que se refiere al primer factor, los perros de raza pequinés, bulldog francés e inglés o el Boston terrier exponen una especial predisposición al jadeo desmesurado. Lo mismo se presenta con otras variedades caninas de tipo braquicéfalo.

Otras posibles causas del jadeo excesivo en el perro 

Finalmente, también debemos mencionar aquí una condición especial capaz de hacer que un perro saque la lengua de manera anormal. Nos referimos al hiperadrenocorticismo o Síndrome de Cushing. Los canes que sufren de este problema exhiben un constante jadeo, incluso cuando se encuentran en reposo.

Y si bien las causas precisas que predisponen el hiperadrenocorticismo o Síndrome de Cushing no han sido determinadas aún por los investigadores, se piensa que el problema puede estar vinculado al aumento de peso, la debilidad en los músculos y otros factores relacionados.

Por último, si un cachorro saca la lengua con demasiada frecuencia y no se consigue saber la razón, es posible que el problema esté causado por fobias, miedo, estrés o ansiedad.