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La toxemia de preñez en la oveja forma está integrada al complejo denominado como Cetosis de los rumiantes. Es una enfermedad de los animales de granja que se presenta por un desequilibrio energético de tipo negativo. Tal cuadro se presenta porque las necesidades energéticas del ejemplar son más grandes que las aportaciones nutricionales del alimento que consume.  Con ello se produce una inesperada dinámica de las grasas acumuladas en diferentes partes del cuerpo.

Por lo anterior, es un problema de salud que afecta especialmente a los ejemplares corpulentos- es decir, a los animales en condición corporal alta- y que tienen elevados requerimientos energéticos y que, tras haber experimentado aceptables niveles de asimilación nutricional, padecen una abrupta disminución de lo mismo. Tal circunstancia también puede estar relacionada con eventos de abundante estrés, por deficiente manejo animal o por un clima demasiado negativo.

Cómo se manifiesta la toxemia de la preñez en las ovejas

La enfermedad ovina que les comentamos se define por un incremento en los cuerpos cetónicos tóxicos en el torrente sanguíneo y por una reducción de glucosa en este mismo líquido. Lo anterior produce una peligrosa intoxicación en las ovejas, así como también problemáticas degenerativas y neurológicas en los riñones y el hígado. Por lo general, los casos más severos de toxemia de la preñez en las ovejas termina con la muerte de los ejemplares afectados.

Durante los últimos meses de la gestación de la cría se incrementan bastante las necesidades nutricionales de las hembras y para que no se presente un desbalance energético en el animal, es indispensable que se presente un incremento en los aportes de energía por vía alimenticia.

No obstante, si ello no se presenta, el organismo de la madre procede a consumir sus reservas de grasa, mismas que son empleadas para solventar las necesidades energéticas de su organismo y de los fetos. Es justo cuando se presenta una situación de hipercetonemia, lo cual produce el cuadro tóxico mencionado anteriormente.

Los ejemplares más afectados son las hembras con sobrepeso y obesidad, debido a que en estos animales la dinámica de la grasa es más considerable y por lo consiguiente, mayor es la cetosis que se presenta.

Otros factores que propician la toxemia de la preñez en las ovejas

Aunado a la gestación como circunstancia que incrementa las necesidades energéticas de la oveja, hay otros factores que predisponen a la mencionada enfermedad, los cuales también producen un aumento de sus requerimientos energéticos.

Dentro de ese grupo de factores propiciantes hay que mencionar ciertas circunstancias climáticas o condiciones poco recomendables de manejo animal (como alteraciones injustificadas en la alimentación de las ovejas, arreos demasiado prolongados, interacciones demasiado bruscas con los ejemplares, una esquila tardía, etc).

En resumen, si bien es cierto que lo más característico de la enfermedad es una reducción nutricional, hay otros factores que también son significativos para desequilibrar las necesidades nutrimentales de las ovejas.

La toxemia de la preñez en las ovejas inicia su manifestación con alteraciones en la conducta de los ejemplares afectados. Posteriormente las ovejas enfermas suelen apartarse del grupo, mostrándose deprimidas y sin moverse durante horas, permaneciendo quietas en un mismo sitio.

Con el paso del tiempo, si las ovejas intentan caminar experimentan una pérdida del equilibrio, caminan en círculos y no pueden esquivar los obstáculos que se encuentran en su camino, contra los cuales tratan de apoyarse.

Tras experimentar convulsiones y repetido golpeteo de sus dientes, además de constipación, pérdida de peso y orina incontrolable, las ovejas enfermas padecen parálisis en los miembros posteriores, condición que se extiende a los miembros anteriores, hasta llegar a cada uno de los músculos de su cuerpo.

Combatiendo la toxemia de la preñez en las ovejas

Hay acciones que se pueden llevar a cabo para combatir la enfermedad ovina que hemos estado comentando en los párrafos anteriores. Una de ellas es evitarles al máximo los eventos de estrés a las ovejas, así como también eliminar por completo los malos tratos a estos animales.

Por otro lado también se requiere el apoyo de un experimentado veterinario para que revise a los animales enfermos y determine cuál es el mejor tratamiento que se debe seguir. Para ello podrá usar diferentes fármacos de eficiente acción que se consiguen sin problemas en las mejores farmacias veterinarias.