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Siempre es posible mejorar el modo en el que nos hacemos cargo de nuestro gato. Siempre hay detalles por optimizar y aspectos para revisar en el cuidado que le ofrecemos a nuestro animal de compañía. En lo que sigue mencionaremos algunos consejos sumamente valiosos para que nuestro gato tenga una buena calidad de vida y plena felicidad al estar en casa.  

Lo primero es brindarles una adecuada protección al ser pequeños. La vacunación es algo indispensable y por ello las primeras vacunas que se les debe aplicar son la triple felina a los dos y a los tres meses de edad. A los dos meses, también se les debe de aplicar la vacuna antirrábica. Si se acostumbra a salir con el gato, o si hay más gatos en la casa, es recomendable aplicarle también la vacuna contra la leucemia, la cual es aplicada por el veterinario, solamente si la prueba de leucemia es negativa desde las ocho semanas y luego debe ser reforzada cuando el animal cumpla las 12 semanas de vida.

La salud del gato bebe

Desde los quince días de vida y de acuerdo con el peso que tenga el gatito, requiere de un tratamiento de desparasitación interna que requiere de gotas. Por lo que se refiere a la desparasitación externa, para mitigar problemas de pulgas, dependerá del producto que se utilice. De hecho, hay algunos productos para la desparasitación externa que vienen en forma de spray y que pueden ser aplicados desde los dos días de haber nacido.

En lo que se refiere a la alimentación que debe recibir un gato desde pequeño, es aconsejable colmar al inicio del día su comedero, puesto que el gato consume diminutas cantidades de alimento durante el día. Y si bien los gatos por su cuenta se alimentan de acuerdo con su libre antojo, lo mejor es racionar a dos tomas días el alimento que se les ofrece.

El correcto aseo del gato

Los gatos son animales que pasan buena parte de su tiempo aseándose. Para ello utilizan su áspera lengua y sacan provecho de su extrema flexibilidad, la cual les da la oportunidad de llegar con ella a cualquier parte de su cuerpo. Por lo anterior, en muchos casos no será preciso bañar a los mininos con agua, o no por lo menos de modo regular. Sin embargo, los gatos bien pueden acostumbrarse a los baños con agua.

En las mejores farmacias veterinarias pueden hallarse productos creados para bañar en seco a los mininos, especialmente a aquellos animales que no se logran acostumbrar al agua. No obstante, a lo que sí deben acostumbrarse los gatos es a un cepillado cotidiano con el cepillo adecuado para cada tipo de pelaje.

La higiene del gato mascota

También es importante dotar con un arenero a nuestro gato mascota. En este sentido hay que conseguir, una bandeja de arena más del número de gatos que se tenga en casa. En este sentido, si se cuenta con dos gatos en el hogar, conviene comprar tres cajas de arena. Estas últimas deben ubicarse en un espacio apacible, de sencillo acceso en el hogar, pero lejos del alimento de los gatos y de su bebedero.

Es preciso efectuar el aseo de la caja de manera cotidiana. Por el hecho de que los mininos son animales bastante delicados, es aconsejable cambiar dos veces a la semana la arena de su caja, siempre de acuerdo con el número de gatos que se tenga en el hogar. Las cajas deben tener arena sin aroma, puesto que algunos mininos se niegan a usarla por el olor que tienen. En todo caso, lo mejor es elegir aromatizantes inodoros y neutros.

El veterinario y los gatos

Por lo que se refiere a las visitas que se deben realizar al veterinario, estas deben de estar motivadas por alguna conducta fuera de lo común que exhiba el animal. Si nuestro gato tiene problemas de tos, vómito, diarrea, estado de ánimo apagado, etc; lo mejor será llevarlo con el veterinario lo más pronto que sea posible.

Lo más aconsejable es que como mínimo una vez al año el veterinario efectúe una revisión general acerca del gato y mantenga un estricto control acerca de su calendario de vacunas. Después de haber cumplido los siete años de edad, es adecuado que el animal tenga un chequeo más minucioso, con exámenes físicos adicionales que nos permitan detectar en fases tempranas problemas que pudieran afectar su salud.